domingo, 11 de enero de 2009

El Rebote


Como viene siendo costumbre las noches de luna llena la gente, la turba, el vulgo ponderado, pierde la cabeza.
Yo, en cambio, me mantengo intacta dentro de los márgenes del raciocinio y consigo esquivar sus embates de locura aunque, a veces, me den de lleno.
Este fin de semana han sido para bien.

Para los que me conozcáis y los que no, se me puede definir como el prototipo de la eterna soltera. Sí, la amiga constante a las que las otras amigas pueden llamar cuando sus novios les han puesto los cuernos o cuando ellas se los han puesto a sus novios y viceversa. O simplemente, la amiga a la que se llama para llorar por teléfono en los momentos de crisis. El paño de lágrimas que hace mucho tiempo dejó de perder la calma porque alguien no la quisiera.

Muchos convendréis en que esta acción constante se merece un puesto en el santoral católico. También lo creo. Pero no es necesario esperar a mi muerte para recibir semejante honor. La luna llena y la histeria colectiva aceleran el proceso. Es por ello, que mis amigas me invitan a comer supliendo el hueco del amado o me hacen beneficiaria del viaje romántico que habían planeado con el susodicho y todo a portes pagados. Como soy la que escucha y la que está disponible, lo que no quieren los otros me lo dan a mí.
Porque el amor caduca, pero el dinero no te lo devuelven.

2 comentarios:

Mabuse dijo...

Gran reboteadora, será por la altura. El rebote se va disipando con el tiempo, a la vez que calienta el suelo...

Incitado por el nuevo BigBrother, facebook, he estado cotilleando por las webs mundiales a ver qué encontraba y he aquí tu blog. ¡Qué arte! A ver si nos hacemos cyberfriends y seguimos con los hallazgos.

Diego.

Orly dijo...

Sta. Catalina Pueyo... musa de las despechadas y despechadoras de amor caduco, recogedora de corazones hechos trizas y de jirones de alma rasgada... A su vez, actriz de teatro, directora de cuentos infantiles y aprovechadora de viajes huérfanos de ex pareja corneada... o cornuda... Demasiado largo para el hueco que dejan los calendarios para el santoral. Las Santas no se distinguen por rebotear, sino por dar asistencias, para seguir con el símil baloncestístico. Demasiado exagerado el perfil de amiga disponible en cualquiera de los momentos... no soy quien para criticar tu autodenominación. (paréntesis "evitativo" de contraataques y posibles descaros bien merecidos). Y ya puestos a pedir un lugar entre los elegidos con aureola capital... quizás el nuevo big brother que dice el de arriba es oteado por el tal Bono, y pasas de suplicar un trono al lado de Santa Teresa de Jesús (como ves mucho menos adjetivizada), a luchar contra Sor Maravillas por un puesto en el Congreso... Ansío poder ver tus nuevas empresas, de las que sólo he oído cosas buenas. Un besazo, Santa... ;)